La belleza nos hace mejores: La iluminación en los Olímpicos de Río de Janeiro

SGM clave en la fiesta de Río 2016

Durham Marenghi fue la mente maestra en el diseño de iluminación de las ceremonias de apertura y clausura de los pasados Juegos Olímpicos Río 2016. Este famoso diseñador decidió que las luminarias que serían sus componentes clave para tal compromiso sería un arsenal de lámparas SGM Light incluyendo P-2, P-5, Q-7 y G-1 Beams, provistas por la compañía italiana de renta Agorá y por la empresa mexicana Grupo ROA (Equipos de Audio, Video e Iluminación Profesional SA de CV).

Marenghi y su equipo fue contratado por la organización Cerimônias Cariocas 2016  y se vieron involucrados sólo diez meses antes de la fecha de inicio de los juegos; algo verdaderamente inaudito “por el retraso” que esto representa. Cabe acotar que Marenghi realizó el diseño de iluminación de los Juegos Olímpicos de Invierno de Turín y trabajó durante los cuatro años previos para lograrlo. Así que en Río, el reto era implacable. Para llevar a cabo todo el espectáculo visual, Durham Marenghi empleó luminarias de Clay Paky (beams y washes), además de seguidores Robert Juliat y una enorme cantidad de luminarias SGM Light.

Durham Marenghi es un diseñador inglés que ha creado las escenas luminosas para una gran variedad de obras de teatro, ópera, danza, ferias, conciertos, edificios históricos, obras arquitectónicas y producciones de televisión por todo el mundo. Fue el creativo de la iluminación para las ceremonias de Juegos Paralímpicos de Invierno de Sochi, Rusia de 2014 y las de los Juegos Olímpicos de Invierno de Turin en 2006. En 2008 fue el responsable del traspaso de la bandera olímpica de Beijing a Londres. Ha diseñado la iluminación para espectáculos en las pirámides de Egipto, el Jubileo de la Reina, la fiesta de año nuevo para la noria de Londres o Le Grande Depart en Leeds para el Tour de France entre decenas de proyectos de renombre internacional.

La ceremonia de apertura fue delicada y teatral mientras que la de clausura fue una típica fiesta brasileña. Una vez confirmado como jefe de diseño, Marenghi contrató a los demás diseñadores apenas en Octubre de 2015. Cabe destacar que el equipo creativo quería una ceremonia de apertura con muchísimas proyecciones y con menos “rayos luminosos”(1). Los primeros esbozos determinaron que Río gastaría menos recursos y menos luminarias que las acostumbradas en otros Juegos Olímpicos.

Proyecciones vs luminarias vs televisión

Marenghi trabajó mucho para crear sinergía con el equipo creativo encargado de las proyecciones. Una cosa que benefició su trabajo fue el singular pebetero(1), donde la flama era mucho más pequeña, más eficiente (menor gasto de gas) y a la vez muy dinámica y hasta enigmática. Esto permitió que Marenghi magnificara el efecto espejo de la escultura del pebetero con luces por detrás, lo que creaba un efecto muy teatral.

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