Desde que vivimos en el siglo XXI no podemos pensar nuestra vida sin computadoras, los que vivimos gran parte de nuestra vida en el anterior, sabemos que hubo un momento en que no existían y que nuestra vida se podía desarrollar sin ellas, pero llegaron para quedarse. Son una gran herramienta y nos ayudan mucho, pero si no estamos atentos, nos pueden dañar la salud.
En el mundo del diseño, que es en el que yo me desenvuelvo, la computadora puede ser tu peor enemigo y me imagino que también en otras profesiones puede llegar a suceder lo mismo. Pero no solamente se trata del desempeño de nuestra profesión, se trata del cuidado de nuestra salud. ¿Se han puesto a medir el tiempo que pasan sentados frente a la computadora? Es importante hacerlo para tomar conciencia de que le debemos a nuestro cuerpo buscar alternativas para desarrollar nuestras actividades sin afectar nuestra productividad.
Las herramientas ergonómicas son una gran ayuda para situaciones como estas ya que están diseñadas y producidas para apoyarnos en el desarrollo de nuestras labores. Pensar que podemos eliminar a la computadora de nuestras actividades no es solamente imposible, sino que sería muy ingenuo tratar de ir contra la corriente; lo mejor es buscar el balance correcto que me permita trabajar durante toda mi jornada sin perjudicar mi salud.
En los últimos años se han comenzado a desarrollar herramientas que me permiten trabajar sentado o parado. Recuerdo la primera vez que vi un escritorio al que le podías cambiar la altura, me sentí parte de una película de ciencia ficción, pero también debo decir que no tuvo mucho éxito ya que era un sistema demasiado caro. Con el paso de los años he visto como se han desarrollado alternativas, que además de ser económicamente viables, permiten que el cambio sea inmediato, por lo que no se afectan las labores por el cambio de posición.
Un gran ejemplo es Float un revolucionario escritorio de altura ajustable que aporta un funcionamiento fácil y sin esfuerzo que lo hace destacar entre los productos que existen para trabajar sentado/de pie. La facilidad de uso se encuentra en el corazón de Float, ajustándose de manera simple y fluida entre las posiciones sentada y de pie, sin interrumpir las actividades. Presenta unas líneas limpias y minimalistas que complementan su funcionalidad moderna. Se puede añadir fácilmente a cualquier entorno de oficina o residencial y elementos clave en la ergonomía, como los sistemas para teclados, los brazos para monitor y las lámparas de trabajo, se incorporan con facilidad.
Otro buen ejemplo es QuickStand Lite que es la respuesta a los problemas de obesidad, diabetes y enfermedades cardiacas que se han incrementado en los últimos años por malos hábitos en el espacio de trabajo. Un reciente estudio realizado por la Universidad de Pittsburgh —que será publicada en el primer semestre de este año— examina las diferencias que hay entre la energía que se requiere para trabajar sentado, parado o alternando estas posturas. Los resultados son muy alentadores y productos como los de Humanscale son una respuesta concreta a un problema delicado que se tiene que resolver de raíz.
QuickStand Lite es ligero y flexible, además de una muy interesante opción para quienes buscan una herramienta para trabajar sentado/de pie que se adapta muy bien a los espacios colaborativos, los esquemas hot-desking y la oficina en casa. Los usuarios pueden cambiar la posición y ajustar la altura en cualquier dirección en un radio de 40° gracias a su brazo articulado. Está diseñado y producido para garantizar soporte y estabilidad utilizando uno o dos monitores de hasta 12 k con un sistema para los cables que mantiene la superficie de trabajo libre y ordenada.
Productos ergonómicos como Float y QuickStand Lite permiten que la computadora se convierta en esa herramienta que tanto nos ayuda a mantener nuestro mejor desempeño con beneficios para nuestro bienestar y salud en el largo plazo. No debemos olvidar que se queman hasta 340 calorías extra si realizamos parte de nuestras actividades parados por 2 horas.
Fotografías: Cortesía de Humanscale