¿Alguna vez te has cuestionado, si la imagen que ves a través de un display, es la imagen que una televisora o una casa productora ha pretendido? ¿Sabes cuantas texturas, cuantos colores, cuantas sombras se pierden en una televisión “normal”? ¿Has imaginado el nivel de brillo y contraste que debería ser estándar para poder disfrutar correctamente las escenas de una película?
Por Oscar Abner Rodríguez, especialista en video
Gran parte de las divergencias en las características de video, están determinadas porque los fabricantes de monitores, proyectores, displays, pantallas, videowalls y televisores, simplemente no acatan las reglas y los estándares y ajustan sus productos sin un rigor crítico.
Demos un repaso a la importancia de la calibración del video y 5 cosas imprescindibles por considerar:
- Por un lado, en el mundo del video, el constante avance de la tecnología nos ha dado temas como 4 y 8K, 120 y 240 Hz, HDR, ITU-R BT.2020 y mucho más. La razón es simple, obtener imágenes lo más cercano a la realidad en cualquier tecnología que despliega video. Por otro lado (salvo muy raras excepciones), recibimos los displays “en condiciones de fabrica”, esto está bien para confirmar que se encuentran listos para su operación, pero no son las condiciones ideales. Cuando en nuestros proyectos seleccionamos un display de video, lo hacemos pensando en la aplicación del cliente y frecuentemente olvidamos que el display viene “en condiciones de fabrica” y que para obtener el máximo de calidad de imagen posible es necesario calibrarlo.
- La calibración de video es un proceso que consiste en ajustar los parámetros de un dispositivo para que muestre los colores, el brillo y el contraste de manera óptima. Hay dos niveles de calibración, el primero es básico y puede realizarlo cualquier usuario modificando los parámetros de brillo, contraste, tinte, color y definición. El segundo es profesional y requiere conocimientos avanzados y equipo especial, se realiza modificando los valores de ganancia por color y gama, los parámetros son registrados por un colorímetro de alta precisión que, conectado a una computadora con un software especial, permite definir con todo detalle los niveles correctos para ese display en particular en las condiciones específicas del sitio donde está instalado.
- El resultado es verdaderamente impactante, como estar asomado por una ventana. Precisamente esta es la razón por la que existen equipos de alta gama y aplicaciones especiales, que son los que normalmente especifican las empresas especializadas en integración residencial o en aplicaciones médicas, científicas o corporativas.
- Los conocimientos necesarios para realizar una calibración de precisión se basan en el principio de colores primarios, su relación con el brillo y contraste, así como las condiciones de iluminación del sitio donde está instalado el display y algo muy importante: considerar las características de la tecnología del display.
- Hacer una calibración de alta precisión sin equipo especial es imposible, el ojo no tiene la capacidad de discernir a detalle la información necesaria, es por ello por lo que se emplean equipos altamente especializados. El primer elemento es un generador de patrones, el cual hace que el display muestre imágenes especificas (precisión de color, uniformidad e intensidad) para la calibración, el segundo es un colorímetro que lee la características de la imagen desplegada y envía los valores registrados al tercer elemento, un software donde se comparan los valores leídos y compara esos valores contra lo que el software identifica como real; el Ingeniero que hace la calibración, va modificando parámetros hasta lograr el punto deseado. El proceso requiere de varias horas de trabajo.
- En temas de entretenimiento, la calibración se hace para lograr un realismo en la imagen, pero hay aplicaciones en las que se requiere un nivel absoluto de precisión en la imagen, como en equipo médico, en estudios de producción o edición, procesos industriales y por supuesto en el entorno corporativo. Para decirlo con claridad, la calidad de imagen está relacionada cada vez más, con requerimientos de desempeño de las propias industrias en las que se ocupa el display; en estos casos la calibración actúa como el elemento necesario para asegurar que la imagen desplegada, es igual a la realidad, lo cual es indispensable en el diagnóstico médico, por ejemplo.
- Cuando se llega al resultado final, el display muestra una imagen en su máximo esplendor, aquí es donde se entiende porque hay normas y estándares. La calidad es un término relativo, en este caso es fácilmente identificable un display calibrado y uno que no, las diferencias en la precisión del color, los niveles exactos de brillo y contraste para dar a la imagen una impecable naturalidad.
Ahora tienes una idea, que, aunque básica, ayuda a entender las diferencias entre calibrar y no hacerlo, el siguiente paso nos corresponde a nosotros los integradores, sabiendo lo que se puede lograr en beneficio del usuario ¿seguiremos dejando los equipos como salen de sus cajas o prefieres entregar el máximo de calidad?
El servicio de calibración profesional de video se ofrece en México a la puerta de los proyectos del profesional de Integración A/V.
Oscar Abner Rodríguez tiene más de 20 años de experiencia en mantenimiento AV de sistemas high end y es técnico certificado en calibración de video profesional. Su contacto es: avsoporte.highend@gmail.com