¿Podemos hacer más en beneficio de nuestros usuarios?

Cuenta una historia que la receta de la abuela era para una pierna de cerdo de 42 centímetros de largo, por años la familia la preparando de esa manera y con ese tamaño exacto a pesar de que a veces era difícil de encontrar por lo mismo. Un día a la tía mas grande de la familia le preguntaron si el tamaño exacto tenía que ver con el sabor o las proporciones del resto de los ingredientes y ella simplemente respondió “claro que no, es que el horno de mi mama tenia 43 centímetros de ancho”.

Esta metáfora trata de ilustrar qué es muy fácil hacer las cosas de una manera sin buscar saber por qué o bien buscar mejores maneras de hacerlas. Y esto es algo muy común en nuestra industria, al grado que estamos muy ocupados corriendo para hacer los proyectos, casi siempre de la misma manera. No es que esté mal, es que nuestra industria se caracteriza por una constante evolución tecnológica y de ahí la necesidad de estar enterado, no únicamente sobre productos o la tecnología misma, sino hacer un alto e imaginarnos como eso de lo que empezamos a escuchar, puede ayudarnos a ofrecer una mejor experiencia a nuestros usuarios.

Temas como automatización, pero no solo para sistemas AV, sino enlazar equipos y sistemas para enaltecer el resultado final, agregando elementos como bienestar, cuidado de la salud, siempre buscando que el usuario sea el centro de todo lo que hacemos.

Hoy hay temas como el círculo circadiano, uso de sensores, reciclaje de basura electrónica… que fácilmente podrían estar en nuestros objetivos, tanto para investigación como para tomar acciones al respecto, no solo como negocio, también porque en nuestra posición de liderazgo ante los clientes, podemos aportar para que en estos temas se genere una conciencia sobre su importancia y la conveniencia de poner atención inmediata

¿En nuestras empresas estamos abiertos a lo que comentan nuestros equipos de trabajo? Ellos ven y oyen muchas cosas y con frecuencia del cliente mismo, temas que pueden tener que ver con deseos o necesidades, ideas de mejora en técnicas, procesos, herramientas y mucho más, lo difícil es por un lado crear la metodología para oírlos y por otro hacer que lo que resulte de esta mejora en comunicación se integre a los procesos de trabajo en nuestra organización.

Reitero que el objetivo es romper la inercia y provocar los cambios que nos hagan más fuertes y nos ayuden a mejorar la organización para ofrecer una mejor atención a nuestros clientes.

Por ejemplo, tradicionalmente nos imaginamos que lo que hacemos es dirigido a los hombres, especialmente en el entorno residencial, pero las mujeres también pueden tener espacios como salas para yoga en casa, cuartos de costura u otros espacios pensados específicamente para ellas.

En esta época de mayor conciencia sobre la conservación del planeta nosotros podemos hacernos responsables de desechar adecuadamente los equipos y componentes de los sistemas que instalamos, claro que nos costaría un poco, pero por una parte nos toca a nosotros y por otra, muchos clientes lo aceptarían de buen agrado. Implementar planes para desecho de baterías, el correcto manejo de energía, evitando desperdicio cuando los sistemas no se usan, la implementación de estándares de AVIXA o CEDIA, inclusión de políticas y procesos, etc. En fin, hay una buena área de oportunidad donde podemos mostrar esa posibilidad de modernización en nuestras empresas.

Si hiciéramos una radiografía de una empresa de nuestra industria, nos encontraríamos que, para los aspectos técnicos, somos buenos pero que tenemos áreas de oportunidad en otros frentes y que, si nos decidimos a enfrentarlos y solucionarlos, podremos pasar a una categoría diferente de empresa, podremos dejar de ser vistos como artesanos y pasar a proyectar la imagen de profesionales. Una buena práctica podría ser empoderar al personal para que se involucren y aporten en temas específicos y como grupo se analicen sus aportaciones para ver la mejor manera de implementarlos, nuestras empresas suelen contar con habilidades y talento que siempre se pueden aprovechar.

Conclusión

Tenemos en México una industria sólida que hemos venido haciendo crecer con el tiempo, nos hemos ganado en muchos casos el rol de consejeros en temas de tecnología, los colaboradores en nuestra empresa tienen oportunidad de aportar más si estamos dispuestos escucharlos y lo mas importante de todo, siempre podemos hacer mas en beneficio de nuestros clientes, pensar en nuevas ideas para enriquecer los proyectos que hacemos y hacernos presentes en temas en los que hay una responsabilidad social.

La suma de todo, lo que hoy hacemos y lo que podemos hacer, sin duda nos hará crecer y vernos más profesionales, el camino no será fácil, pero sí muy satisfactorio.

La música de hoy fue inspiración de Herbie Hancock con su legendario álbum “Maiden Voyage”, fue grabado en 1965, lo acompañan Freddie Hubbard en la trompeta, Ron Carter en el bajo, Tony Williams en la batería y George Coleman en el sax. El disco sigue sonando tan natural como si acabara de salir al mercado y entre sus piezas hay al menos dos que figuran entre los estándares del mundo del jazz, absolutamente memorables y atemporales. Música así de buena merece un whisky, también con ese grato sabor que deja disfrutar dos actividades fascinantes, música y sabor y así apareció de las tierras altas un Carduh, de color dorado y aroma frutal combina de maravilla en una tarde cualquiera.