Cubo Negro en Museo Materia de Sinaloa

ubo Negro 8K es una réplica de Deep Space 8K, una instalación del centro Ars Electronica de Austria, de donde es originario este proyecto. Se trata de uno de los íconos de este nuevo museo de ciencia que se define como un laboratorio museológico para construir el futuro.

Ciencia explicada desde la tecnología
En Cubo Negro 8K se proyectan imágenes inéditas de mundos pasados y presentes, objetos cercanos y elementos del espacio estelar, combinando géneros artísticos, ámbitos científicos y aplicaciones tecnológicas. “El Cubo permite una experiencia interactiva dentro de un espacio inmersivo”, explica Luis León, director general del Centro de Ciencias de Sinaloa. “Además propone un nodo para la discusión del desarrollo tecnológico, el uso de la imagen y los conceptos propios a la cultura transmedia”, añade.

El Cubo es uno de los ejes conceptuales del proyecto museológico. La experiencia como visitante se construye a partir de interacciones más análogas y corporales. La idea inmersiva del cubo da continuidad a esa aproximación – al requerir movimiento, caminar, interactuar dentro del espacio circundante.

La instalación ha sido una colaboración entre Ars Electronica (como creador del concepto del espacio y dueño de la licencia), Planetarios Digitales (un integrador tecnológico mexicano cuyo expertise reside principalmente en planetarios), el Centro de Ciencias de Sinaloa y el Gobierno del Estado de Sinaloa.

“Fue una colaboración totalmente enriquecedora”, dice León. “Al ser esta la primera réplica de Deep Space 8K fuera de Austria, se trató de un proyecto muy laborioso y de mucha gestión, empezando por los distintos estilos de trabajo, pasando por la comunicación entre todos los involucrados y hasta la implementación en sitio de un proyecto inédito en América. Es de resaltar también la voluntad política del gobernador de Sinaloa Quirino Ordaz por hacer este proyecto realidad”.

Imágenes 8K
Cubo Negro 8K es un espacio interactivo con proyección 8K en suelo y pared a través de ocho proyectores Christie Mirage 304K (120Hz, tecnología 3DLP®, resolución 4K, 30.000 lúmenes), lo que permite obtener imágenes en 2D y 3D estéreo de extraordinaria calidad. Cuatro de ellos se combinan para proyectar una sola imagen en una pared de 13 metros de longitud por 7 de altura, mientras que los otros cuatro proyectan una sola imagen de la misma dimensión en piso (se trata de paredes y piso normales con un recubrimiento de pintura blanca epóxica para la porción de proyección, tanto la pared como el piso miden 144 m2 cada uno).

En total, los ocho proyectores proporcionan 70,778,880 píxeles, dando una resolución de más de 8192 x 8620 píxeles tanto en piso como en pared. Los Christie Mirage, que reciben señales de video tanto por fibra óptica como por HDBaseT, son alimentados por servidores de alto rendimiento especialmente diseñados para tal fin por Ars Electronica. Los contenidos son interactivos y la instalación incluye sensores láser para lograr tal efecto. Además, la audiencia puede explorar interactivamente imágenes gigapixel.

“La calidad es impresionante”, dijo el director general del Centro de Ciencias de Sinaloa. “Tener esa cantidad de píxeles dentro del espacio con tal brillantez y poder tenerlos a esa cercanía es inigualable. Ocho proyectores 4K para lograr una resolución de 8K con contenido audiovisual creado especialmente para este formato logran llevarte a una experiencia completamente inmersiva. Desde el sencillo manejo, la respuesta, el software y el resultado final que brindan, son la herramienta ideal para el espacio.”
El sistema de hardware y software de Ars Electronica, único en su tipo a nivel mundial, requería un sistema de proyección de altísima calidad.

Vanguardia en experiencias museográficas
Para Enrique Fonte, el primer reto fue entender el proyecto y sus alcances para contribuir a diseñar, configurar lo que no estaba definido en su totalidad, pues era responsabilidad del integrador. El segundo y muy importante fue brindar las condiciones en sitio para sacar el mayor provecho a la calidad de proyección y desempeño de los proyectores Christie Mirage. Y explica: “para lo cual además tuvimos durante prácticamente tres meses personal de Planetarios Digitales, acompañando al Centro de Ciencias de Sinaloa en todo lo referente a la preparación del sitio, pues había que integrar un conjunto de actividades diversas con diferentes disciplinas, incluyendo al constructor y sus ingenierías y verificar el check list que permitiera realizar una instalación adecuada. El resultado final fue extraordinario y se logró el objetivo, una instalación de avanzada con un sistema de proyección también de vanguardia, no sólo en México sino de las Americas”.

Luis León repasa la colaboración con los iniciales creadores europeos del concepto: “Tenemos una importante alianza con Ars Electronica; presentamos en nuestros ciclos de exhibición diversos  proyectos desarrollados por ellos, además de proponer diálogos sobre temas propios al desarrollo museológico, las relaciones posibles en el cruce de arte y ciencia e incluso la creación conjunta de contenidos en un mediano plazo incluso dentro del Cubo Negro”.

Planetarios Digitales, además de suministrar los ocho proyectores más el hardware y software propietario de Christie, proporcionó asimismo el sistema de sonido 5.1 surround que provee audio de tres fuentes distintas ruteadas con mezcladora digital, incluyendo micrófonos para las presentaciones. También implementó el tratamiento acústico, así como cuatro espejos para proyectar hacia el piso del Cubo Negro, más casi dos kilómetros de cableado y un gran número de partes y accesorios.

Didáctico y pedagógico
El director general del Centro de Ciencias de Sinaloa acota la importancia didáctica y pedagógica del espacio: “La experiencia es única. Siempre el desarrollo y puesta en marcha de un proyecto inédito requiere una curva de digestión y aprendizaje; en especial cuando hay un referente simbólico en algunas comunidades de visitantes. Esto se refleja en la reacción a partir de ciertas edades. Los niños, niñas y adolescentes perciben tanto la tecnología como la propuesta, muy cercana y adecuada. Un grupo de adultos tenía expectativas relacionada a otros referentes pero al vivir la experiencia pudieron aceptar y disfrutar gratamente la propuesta”.
Un elemento clave del proyecto curatorial era subrayar Materia como un laboratorio museológico para construir el futuro. El Cubo refleja esta idea proponiendo nuevos formatos de experiencia visual como paradigma ante los modelos de interactividad que se utilizan incluso hoy en varios museos de ciencia.

Para Luis León, “la experiencia del Cubo Negro 8K solo la puedes encontrar en Austria y en nuestro museo Materia de Culiacán, Sinaloa. No existe un espacio en el mundo que tenga la infraestructura, ni proyecte contenidos 8K en sentido inmersivo, en 2D, 3D, interactivo y gigapixel como ofrece Cubo Negro 8K.”

Enrique Fonte de Planetarios Digitales concluye: “Se trata de un espacio de vanguardia de extraordinaria originalidad, único en las Américas, al lograr imágenes sorprendentes en 2D y 3D estéreo en sus dos pantallas, al frente y al piso, creando una inmersión total para el espectador”.

Michaela Fragner, Klaus Dieterstorfer, Oliver Elias, Thomas Viehbock y Michael Mondria.