Era 300 de Sonos, el futuro nos alcanzó

Por Eliseo Vega @eliseovega

Esta reseña ha tomado mucho tiempo, tal vez más del que debía, pero al fin, aquí están las letras que develan mi experiencia con las bocinas Era 300 de Sonos. Y prepárense porque el futuro del sonido está llegando.

La Era 300 de Sonos es un producto realmente nuevo, pionero en su clase, lo que lo hace una solución que hay que mirar (y escuchar) por muchos ángulos. Después de una larga convivencia con este altavoz puedo decir que me ha gustado mucho y que merece estar en casa de aquellos melómanos entusiastas de las nuevas tecnologías aplicadas a la música.

Era 300 es la respuesta de Sonos al boom del audio espacial y al códec Dolby Atmos que “explotó” mercadológicamente desde 2022. Pero seamos claros, Dolby Atmos surgió ya hace más de 10 años y viene siendo el referente en sistemas de audio surround inmersivo multicanal para cine. Además, no es el único códec “inmersivo”, pues ahí está DTS:X, Auro 3D, IMAX Enhanced.

Cuando estuvimos en la presentación de la Era 300 en Nueva York hace algunas semanas, Giles Martin, hijo de la leyenda George Martin y actual jefe del consejo del sonido en Sonos, dijo: “Dolby Atmos es un cambio radical en la forma de producir y escuchar música, para mí el cambio es tan dramático como lo fue pasar del monoaural al estéreo”.

Y sus palabras calan hondo. Desempaco la Era 300, hago la configuración y puesta en marcha desde la aplicación Sonos y decido empezar este viaje musical con el disco Revolver de The Beatles, obra remezclada para Dolby Atmos, por el mismo personaje que nos hizo la primera demo de la Era 300.

Así que me decido escuchar “Eleanor Rigby” y no doy crédito de la magia sonora que desprende la Era 300. El sonido no se parece a nad.  a, definitivamente es una nueva referencia. De las pocas ocasiones en mi vida que una bocina provoca que se me erice la piel.

Desde una sola bocina tienes un sonido envolvente cual burbuja con voces llegando desde diversos ángulos, los instrumentos perfectamente separados, con un escenario sonoro gigante; tengo la sensación de estar escuchando el futuro del audio. Pero acá hay algo que mencionar: Giles es el responsable de esta mezcla y uno de los mayores conocedores de las posibilidades de Atmos en la industria musical.

El diseño

El diseño de este altavoz es realmente disruptivo. De primera vista, la Era 300 representa una bocina de formas raras o al menos peculiares con esta “cuña” superior (una especie de cuenco), que yo no había visto antes en otro altavoz. Las formas ovaladas y redondas completan una forma que grita “véanme”.  Nada discreta pues.

Luego habrá que mencionar la calidad de construcción, donde Sonos se pinta solo. Si externamente es una joya del diseño industrial moderno, su ensamble es digno de aplausos. Se nota rígida, sólida, pesada. Y la superficie es llamativa en términos táctiles.

Se agradece que el cable de corriente sea desprendible y que cuente con puerto USB-C desde la cual puede usarse –mediante un dongle externo que se vende por separado– una entrada auxiliar analógica-digital o una toma Ethernet para mejorar la conectividad.

Se me estaba pasando, la Era 300 cuesta $10,999 pesos en México. Barata no es, pero su precio está justificado por su diseño, construcción, desempeño y sobre todo por ser pionera en el sonido espacial y Dolby Atmos.

El hardware

Si quieres saber más sobre la descripción del producto, puedes ver nuestro artículo sobre la presentación de estas bocinas. Cuatro tweeters garantizan una reproducción fiel de las frecuencias altas y medias. El altavoz de agudos medio que se dispara hacia delante proporciona una imagen central suave, mientras que los dos altavoces de agudos medios que se disparan lateralmente crean una separación estéreo. Un altavoz de agudos orientado hacia arriba refleja el sonido del techo cuando se reproduce contenido Dolby Atmos. Dos woofers maximizan la salida de gama baja y están inclinados a izquierda y derecha para permitir la reproducción estéreo. Dentro hay 6 amplificadores digitales Clase D que no especifican potencia, pero créeme que puede sonar bastante fuerte para una sala promedio residencial.

La colocación

Hay algo que resulta importante mencionar: la Era 300 es bastante susceptible a su colocación, mucho más que sus hermanas las Sonos One o las Sonos Five. La Era 300 depende más de la acústica de la sala o la habitación donde se le ubique. Además, resulta imprescindible ubicarla a la altura adecuada. Si vas a escucharla sentado, debería ponerse sobre bases, en algún mueble o credenza para que el sonido directo se encuentre a la altura de nuestros oídos (cuando estamos sentados), esto es sobre 90 cm más o menos. Si, por el contrario, escucharemos la Era 300 mientras hacemos labores del hogar o será nuestra bocina ideal para bailar, es mejor ubicarla sobre una base que la lleva a 150 cm del suelo. El sonido será fenomenal.

Estas son las recomendaciones de Sonos respecto a su colocación en nuestra casa –algunas aplican para sonido estéreo y otras para surround:

La sintonización Trueplay equilibrará el sonido para cualquier lugar donde coloque la Era 300, pero para que el altavoz proyecte el sonido de la forma más eficaz, a continuación, se indican algunas directrices:

  • Era 300 debe colocarse en interiores y tener aproximadamente dos pies (,61 m) de espacio libre por encima de la cabeza para obtener una calidad de sonido óptima. No se recomienda su colocación en un espacio cerrado, como una estantería, ya que podría afectar a la dispersión y a la claridad de la reproducción.
  • Cuando coloque la Era 300 junto a una pared o en una estantería, deje al menos 2,5 cm (1 pulg.) de espacio libre en la parte posterior y 20,32 cm (8 pulg.) a cada lado del altavoz.
  • Cuando utilice los altavoces Era 300 como sonido envolvente, deje al menos 20,32 cm (8″) de espacio libre a los lados de cada altavoz.
  • Las configuraciones estéreo tradicionales suelen tener un lugar ideal para sentarse en una habitación para obtener la mejor experiencia auditiva, pero con Era 300 el sonido se envía en todas las direcciones, por lo que experimentará una gran riqueza de detalles sin importar dónde esté sentado. Nota: No coloque Era 300 verticalmente o en un ángulo pronunciado o el audio se detendrá.

Luego, hay que mencionar que la respuesta sonora tiene mucho que ver con las paredes que la rodeen. Si bien es cierto que nunca será recomendable ponerla pegada a los muros, y mucho menos meterla en un mueble (esto arruina la experiencia Atmos), si es bueno que el sonido reflejado (de sus drivers laterales y superior) genere reflexiones en las paredes cercanas, lo que ayuda a la sensación de un soundstage “enorme”. El sonido no parece salir únicamente de las bocinas.

Aquí es donde Trueplay hace magia. Me parece que incluso Sonos no ha presumido lo que debería su tecnología Trueplay. Para los que la desconocen, se trata de un análisis exhaustivo de las condiciones acústicas del lugar, para luego mediante un poderoso procesador DSP generar ecualización, respuesta de frecuencia y variaciones en tiempo y fase de la bocina para generar el mejor sonido posible contrarrestando las deficiencias acústicas del espacio. Trueplay funciona empleando la aplicación de Sonos y el micrófono integrado de un iPhone o un Android y un ejercicio de captura sonora que requiere un minuto de nuestro tiempo. En algunos casos, los resultados son excepcionales. En mi caso, mejoró mucho, bajando el nivel del grave-medio y limpiando todo el espectro de las voces.

La usabilidad

Sonos y las plataformas de streaming como Apple Music, Amazon Music Unlimited, Tidal y las que se usen Dolby Atmos, tienen un fuerte trabajo para comunicar ¿cómo logro el sonido inmersivo? No es nada fácil para la gente que no es clavada en cuestiones técnicas. Y esto puede ser frustrante.

Como ya lo mencionamos Dolby Atmos requiere ajustes dentro de la app Music de Apple. Pero para escuchar contenidos reales Dolby Atmos es necesario utilizar exclusivamente la app de Sonos, porque Airplay2 no “transporta” el códec Dolby Atmos (al menos en el ecosistema Sonos, esto no sucede).  Hay que entrar en las apps y activar el sonido Dolby Atmos sea en modo automático o en modo “siempre”. Sin este paso, no hay sonido inmerso y mucha gente no notaría diferencia con sonido estéreo.

Tú podrías estar usando la app de Apple Music o la de Amazon, e incluso verías los logos de Dolby Atmos, pero al enviar la señal inalámbrica por WiFi a la Era 300 tendrás un excelente sonido, pero no es Atmos y es incomparable cuando generas la metadata desde la app de Sonos. ¿Confuso? Si, si lo es.

Para hacerlo simple, si quieres experimentar el máximo potencial del sonido inmersivo usa solo la app Sonos.

En cuanto a los grupos, Sonos así lo explica:

Al reproducir música Dolby Atmos, si se agrupa un producto no compatible con Atmos, la reproducción de audio del grupo cambiará a estéreo. Cuando el producto no compatible con Atmos se elimine del grupo, el audio volverá a cambiar a Música Dolby Atmos cuando empiece a reproducirse la siguiente pista Atmos.

En cuanto a la app de Sonos solo tenemos dos ajustes, un control que hay que activar para que la música en 3D inmersiva siempre que esté disponible. Y hay un control deslizable para aumentar el efecto de sonido de altura en Audio Espacial y Dolby Atmos.

Ya todos sabemos que Sonos utiliza la red WiFi para enviar señal de audio y metadatos, sin embargo, la calidad y estabilidad de tu red puede pasar factura a la calidad de audio de tu sistema. Los sistemas son adaptativos, esto es comprimen su señal cuando la red trae baja velocidad o bajo ancho de banda y la “liberan” cuando los estándares de la red se normalizan. Seguramente lo has notado en plataformas como Netflix.

Al principio Sonos parece no ocupar mucho ancho de banda ni tanta velocidad de la red, esto cuando tienes una bocina Sonos, pero en cuanto tu ecosistema crece, cada bocina “va comiendo” un poco de tu red y si eres usuario intenso que manda sonido a todas las habitaciones, podrías necesitar una red de mayor velocidad y mayor ancho de banda. Por suerte, en México ya es común encontrar planes de 50, 100, 200, 500 megas y hasta 1Gb en ciertas zonas del país.

Aunque nadie lo menciona la conexión es vital:

  • Lo mejor es Ethernet gigabit
  • Lo segundo mejor son las redes Wifi 5 GHz
  • Lo que más compromete (y limita la calidad del sonido), son las redes 2.4 GHz
  • Entre más canales pongas más ancho de banda y más velocidad requerirá el sistema.

Apple Music, la mejor experiencia

Estuve experimentando con Apple Music y con Amazon Music Unlimited y he de decir que la experiencia con Apple Music es muy superior, su interfaz es más agradable y fácil de navegar, pero sobre todo es fácil identificar los contenidos en Audio Espacial. De hecho, Apple los promueve y los puedes encontrar sin tanto problema. En Amazon Music Unlimited hay que estar haciendo búsquedas más profundas para encontrar contenidos inmersivos. Cuando pude comparar, creo que el sonido de Apple Music es ligeramente superior, lo cual se nota en mayor rango dinámico (que no es lo mismo que volumen) y mejor separación de instrumentos y mayor textura en voces.

Aquí empezamos con un detalle a considerar: tú encuentras los contenidos en Apple Music y luego se los quieres enviar por Airplay2 a la Era 300. Claro que se puede, solo que pierdes Dolby Atmos. Por una extraña razón que tiene fundamento técnico (que no entraremos en detalle aquí), para acceder a contenidos Dolby Atmos debes usar forzosamente la aplicación de Sonos, lo cual me parece muy bien porque cada vez se nota más fluida y pulida, pero Sonos no te dice qué contenidos están en Dolby Atmos. No hay una marca, un logo, una señal dentro de la aplicación que así te lo indique.

Bueno, lo hace, pero hasta que ya estás reproduciendo la canción (a diferencia de la aplicación de Apple Music, que en la info del álbum o de la canción ya te lo deja saber). Entonces para este experimento-reseña tuve que andar brincando de una aplicación a la otra. Esto debería ser corregido mediante una actualización de Sonos, pero no ha sucedido hasta el momento.

El desempeño

La Era 300 es una bocina con un alto desempeño y bastante equilibrada. Tiene buen punch en graves, un medio rango muy limpio y notable extensión en altas frecuencias. Para escucha ocasional la Era 300 es más que suficiente, para melómanos que necesiten una escucha crítica, la Era 300 necesita de la ayuda de un subwoofer, en este caso, el modelo Sub Mini de Sonos es el adecuado.

Los medios son muy agradables al oído, controlados y sin estridencias. Es uno de sus puntos fuertes, esta parte del  espectro auditivo es muy natural, mientras que los graves tienen boost que favorece algún tipo de musica pero después de algún tiempo puede resultar algo cansino.

Para poder escribir este texto, tengo que decir que, literalmente escuché esta bocina varias horas al día y durante más de 40 días, así que me empapé del sonido inmersivo (y también estéreo) de la Era 300. Entre más escuchas Dolby Atmos, quieres más. El descubrimiento sonoro resulta adictivo

La versatilidad

Aquí viene la interrogante: ¿sirve solo para Audio Espacial o Dolby Atmos? La respuesta es no. La Era 300 funciona con estupendos resultados en música de plataformas que viene en formato convencional estéreo. Solo que aquí estoy haciendo hincapié en las novedades auditivas del sonido inmersivo.

Después de esta primera toma de contacto, estoy seguro de que la mejor combinación para escuchar música con sonido inmersivo será teniendo dos unidades de Era 300, lo que “llenará” una sala, incluso mediana, mucho mejor si agregamos un Sub Mini.

La Era 300 es realmente versátil, funciona como bocina stand-alone, puede reproducir contenidos estéreo o Dolby Atmos, puede parearse en estéreo, puede ser usada como par surround (en este caso solo funciona con la barra Arc o con Beam gen 2).

En cuanto a Cine en Casa, Sonos actualmente permite configuración máxima de 7.2.4 (3 frontales y dos de altura en Arc, más 2 subs, más dos de altura y 4 surrounds de Era 300).

En Home Theater

Por ahora hemos hablado de la Era 300 en su modo música, pero donde podría resaltar aún más es en el modo cine. Hay que decirlo, hoy día no hay mejor bocina para surround inmersivo para contenidos visuales que la Era 300. Nada se le acerca siquiera. Es un altavoz con 6 drivers internos, uno apuntando hacia arriba, uno hacia el frente y dos hacia cada uno de los laterales. Si quisiéramos emular esto requeriríamos una bocina dipolar de dos vías, una caja surround convencional y una caja add-on para disparo de sonido superior (o de altura). No me extenderé más con esto del cine, pues para hacerlo adecuadamente requieres dos bocinas y para esta evaluación solo tengo una Era 300.

Conclusión

Después de esta convivencia con la Era 300 he descubierto que esta es la bocina para el futuro. Ni remotamente estoy diciendo que el Audio Espacial o Dolby Atmos sea mejor que el estéreo, simplemente son diferentes experiencias; la novedad nos atrae.

La Era 300 será recordado como el altavoz pionero en sonido inmersivo para el público en general. Su capacidad auditiva cumple con la promesa de hacernos imaginar otros mundos sonoros, de recrear en nuestra mente sonidos que podrían ser no reales en un concierto, pero que evocan emociones íntimas y compartidas. El sonido de la Era 300 toca fibras y ya con eso es suficiente.

La recomendación

¿Eres early adopter? ¿Te llama la atención todo el hype de Dolby Atmos y Audio Espacial? Entonces la Era 300 es para ti. Actualmente no hay nada en el mercado que la iguale (podrías pensar en HomePod 2, pero la de Sonos es mucho más versátil y pertenece a un ecosistema que es líder en sonido multiroom inalámbrico).

Pero la reproducción en estéreo también es de gran nivel, por si fuera poco, es la mejor bocina surround para cine en casa de alto nivel. De esta manera tienes un altavoz que te hará feliz con toda la música actual, pero te da una probada del sonido del futuro. Sonos lo hizo de nuevo.

Lo que no me gustó:

  • Les hace falta un indicador luminoso de Dolby Atmos
  • Les hace falta un interruptor físico para ir de sonido stereo / DA. O al menos un botón virtual en la app; algo de acceso rápido. Aunque es posible, resulta engorrroso.
  • A la app de Sonos le falta mostrar contenidos en Dolby Atmos en los previos; solo lo hace cuando ya estás reproduciendo una canción
  • En la app de Desktop para Mac, no la muestra nunca, no hay manera de saber si estás en estéreo o en Dolby Atmos; punto a mejorar urgente.
  • La nueva función de búsqueda general de Sonos es lenta y poco precisa.

¿El rival está en casa?

En lo personal, creo que la Sonos Five es la mejor bocina que ha creado Sonos para sonido estéreo y cuesta $12,499 pesos. Si a ti no te interesa en lo absoluto el tema del audio inmersivo, esta bocina debería ser tu opción. Supera con creces a la Era 300 en desempeño sonoro, pero evidentemente no podrá reproducir contenidos en Dolby Atmos y Audio Espacial y tampoco podrá usarse como surround.

LA IMAGINACIÓN AL PODER

Giles Martin dijo en una entrevista con Zane Lowe para Apple Music: “Mi padre y The Beatles se preguntaron ¿Cómo creamos mundos (sonoros) que no existen?’. Así que desde Sgt. Pepper’s, originalmente con Tomorrow Never Knows o Revolver, empezaron a hacerlo con esos discos que no son en directo. Eran asuntos que sólo podían ser imaginados por alguien como John Lennon, en su cabeza. Trató de capturar lo que imaginaba y ponerlo en un disco; y esta es la evolución del sonido, y no es sólo tecnología, también es imaginación –creo que esa es la clave”. Tomado de https://www.futuremusic-es.com/giles-martin-mezcla-dolby-atmos-the-beatles/

RECUADRO

Sonidos que no discriminan: del infierno a la gloria

La escucha en Atmos es muy diversa, hay cosas maravillosas y cosas desastrosas, es el precio de esta nueva revolucíón sonora. Al ser novedad, las mejores mezclas en Audio Espacial vienen de lo más nuevo (trap, urbano, corrido tumbado, regueton, norteño, regional) o de los clásicos de catálogo (rock, jazz, metal, pop), así que si lo tuyo está fuera del mainstream, no tendrás música de tus artistas favoritos en Dolby Atmos.

De lo súblime tendría que mencionar los discos de The Beatles ya re-mezclados para Dolby Atmos. Todos ellos suenan gloriosos, pero de manera personal Revolver es mi favorito, pero puedes pasar horas escuchando la Era 300 con Sgt Pepper’s Lonely Hearts Club Band,  Abbey Road, Let It Be, el EP de Strawberry Fields Forever / Penny Lane o la estupenda recopilación 1.  Aquí es donde deberíamos empezar, son los ejemplos más logrados del sonido inmersivo en la actualidad. Punto.

La escucha me llevo a The Rolling Stones con su Goats Head Soup y al Pet Sounds de los Beach Boys, ambos también mezclados en Dolby Atmos por Giles Martin. Pura crema.

Luego mucho, muchísimo reguetón, trap y género urbano que tuve que soportar con estoicismo. Y casi desfallezco con el regional mexicano, el norteño y sus aliados, pero mis orejas siguieron desafiando el sonido peculiar de estos géneros.

No quisiera gastar espacio para mencionar las decenas de ejemplos de producciones desastrosas en Dolby Atmos, solo diré que el Divo de Juaréz se infartaría de escuchar lo que han hecho con el sonido de sus discos.

Aún así estos son mis favoritos:

Samara Joy, I Miss You So. Jazz contemporaneo con una voz joven y poderosa que te envuelve. La grabación es impresionante en tamaño y en detalle.

Cuco, Fantasy Gateway. Trabajo exquisito con un montón de capas ambientales que crean un universo musical exuberante. Destaca el trabajo del joven productor mexicano Nacho Sotelo.

Tom Petty and the Hearbreakers, Greatest Hits. Producción con una mezcla impecable que pone cada instrumento en una dimensión tangible. Rock sin concesiones que suena increiblemente inmersivo.

Elton John, Honky Chateau. El pop más fino se cruza con una mezcla etérea y evocadora. El piano suena con todos sus matices y el dominio vocal les hace fácil el trabajo a los ingenieros. La atmósfera es un tanto cósmica.

Nina Simone, Little Girl Blue. Este disco debería ser materia 101 para los aspirantes a ingenieros de grabación. La nueva mezcla destaca los planos donde la música tiene impacto y donde las reflexiones hacen el trabajo de envovencia.

Pixies, Doolittle. Si crees que no podrías descubrir nada de este clásico del grupo de Boston, prueba a sumergirte en esta mezcla Dolby Atmos. Parece que le han pasado una pulida al óxido y emociona como si fuera 1989.

Alicia Keys, Apple Music Live, Alicia Keys. Difícil es lograr un buen disco con grabación en directo y este es un bombazo. Pop elegante con una mezcla que desmenuza cada tintineo de la banda y hace lucir la bendita voz de esta mujer.

Carly Rae Jepsen, The Loneliest Time. Clase maestra en la colocación de objetos sonoros musicales que generan este sentido inmersivo que le hace justicia a una prístina producción.

Lynyrd Skynyrd, Second Helping. Esta es la manera magistral de rescatar un clásico de catálogo, poniéndole un sonido futurista. A cantar el coro: Sweet Home Alabama!

Kae Tempest, The line is a curve. Hip hop con una base rítmica machacante y una voz increiblemente inteligible. El escenario sonoro es gigantesco y encantador.

Joe Hisaishi & London Symphony Orchestra, Dream Songs: The Essential Joe Hisaishi. Si piensan que un piano no puede provocar la ambientación sonora inmersiva a gran escala, dejense llevar por la magia de este compositor, director y pianista japones, famoso por sus trabajos en Studio Ghibli. Soberbio.

Alejandro Fernández, Hecho En México (Edición Especial Apple Music). El productor mexicano Aureo Baqueiro es un referente de la industria. Música mexicana bien ejecutada, excepcionalmente grabada y genialmente mezclada. Sin estridencias.

Adrián Favela y Carín León, Cosas del Diablo. Al César lo que es del César. Podría no gustarme el género, pero la producción es “de jefes”. Andrés Franco (ex Rostros Ocultos) es la mano que mece la cuna detrás del sonido de este cañonazo.

Luis Miguel, Aries. Si dejamos de lado el regional, el urbano y el norteño, hay muy pocos discos mexicanos con Dolby Atmos, por ahí uno que otro de pop y creo que ninguno de rock. Es así como las producciones de Luis Miguel destacan en Dolby Atmos con un sonido cristalino, detallado, inmaculado y hasta poderoso. La ambientación sonora inmersiva le cae muy bien.

 

Preparé una lista de reproducción de 100 canciones variadas con lo que considero que representa mejor la sensación inmersiva y envolvente de Dolby Atmos y la puedes encontrar en: https://music.apple.com/mx/playlist/buenas-en-atmos/pl.u-pKpMs47dYAW

Dolby Atmos, el futuro se adelantó

Dolby Atmos es un códec de audio basado en objetos sonoros. La tecnología Dolby Atmos permite distribuir a las salas de cine hasta 128 pistas de audio, además de los metadatos de descripción de audio espacial asociados (datos de ubicación o automatización panorámica, datos sobre el movimiento, tipo, intensidad, velocidad y volumen del sonido), para que se reproduzcan en los altavoces en función de las capacidades de la sala. En la especificación residencial de Dolby Atmos, admite un máximo de 34 canales renderizados individualmente.

Hasta aquí, diremos que Dolby Atmos permite ese sonido inmersivo tipo burbuja, donde ahora los sonidos provienen de “todos lados”, incluyendo las capas superiores, espacio donde “fallaban” los sistemas surround convencionales.

Luego llegamos al tema de música. Si bien es cierto que ya había habido intentos de llevar la música a la experiencia Dolby Atmos a través de discos Blu-ray (algunos bajo el formato Pure Audio), todos ellos fueron experimentos de nicho. Es hasta que Apple decide competir fuerte en las plataformas de streaming, plantándole cara al rey llamado Spotify. En apenas un par de años, Apple Music transformó todo su catálogo con calidad CD, Lossless o incluso High Resolution Lossless, luego empujo a la industria a remezclar miles de canciones en Dolby Atmos, solo que Apple le llamó Audio Espacial. Finalmente, Apple develó un servicio de streaming únicamente para música clásica.

Tenemos que decirlo, Apple es la empresa que está transformando la industria musical, como nadie.

Esto del Audio Espacial y Dolby Atmos puede causar cierta confusión, pero en realidad Audio Espacial se desprende de la capa binaural de la pista Dolby Atmos creada para la reproducción a través de audífonos.

Audio espacial tiene dos concepciones:

Spatial Audio se refiere al entorno o hardware de Apple: iPhone, iPad, Mac o Apple TV4K+ que se conecta a dispositivos que recrean el sonido inmerso como son los audífonos AirPod, AirPod Pro, Airpod Max, Beats o Home Pod2. Spatial Audio también se refiere a la capa de sonido inmersivo “bajado” a binaural de manera que pueda escucharse la sensación full surround 3D en un par de audífonos. Spatial Audio convive con la capa original Dolby Atmos que está indicada para altavoces y sistemas completos desde 5.1.2 en adelante.

Aunque los números son muy diversos, las cifras apuntan a que hay actualmente 100 millones de canciones en los servicios de streaming y que apenas existen 100,000 canciones con el sello Dolby Atmos o Audio Espacial. Entonces, en 2023 tenemos el 0.1% del contenido con esta tecnología de sonido inmersivo. Dato para considerar.

Y Apple Music está exigiendo más y más contenido en Audio Espacial y las grandes disqueras están contratando muchos estudios en todo el mundo para remezclar miles de discos. Después de Apple Music, se subió Amazon Music Unlimited y Tidal a la moda del sonido inmersivo. Así que, de los grandes, falta Spotify, Deezer y Qobuz.

  • La maquinaria va a marchas forzadas. Pequeños o grandes estudios están siendo contratados para esta generación abrumadora de nuevo contenido y como ustedes podrán imaginarse, esto acarrea muchos problemas. Veamos algunos:
  • Los estudios necesitan invertir en un setup para Dolby Atmos. Al menos un sistema 7.1.4 con monitores de calidad de estudio de grabación y requieren la aplicación Dolby Atmos Renderer para incorporarla a su workflow (Logic Pro, Pro-Tools, Nuendo, Cubase, Pyramix o Resolve) y tal vez un Dolby Audio Bridge, necesario para enrutar el audio desde un DAW a Dolby Atmos Renderer en un único ordenador, solo está disponible para macOS. Los clientes que utilicen Windows deben ejecutar Dolby Atmos Renderer en un ordenador independiente de su DAW y utilizar una solución de hardware para enrutar el audio hacia/desde el DAW.
  • Hay muy pocas producciones 100% desarrolladas para audio espacial y Dolby Atmos. Para que una producción original cumpla con ese requisito debería ser grabada en modo multicanal, mezclada bajo los parámetros de Dolby Atmos y masterizada para darle salida sea en plataformas de streaming y en formatos físicos.
  • Dicho lo anterior, lo que estamos oyendo son mezclas nuevas de catálogos que originalmente se produjeron para sonido estéreo y que hoy están siendo transformadas o re-mezcladas para su salida en Dolby Atmos.
  • La calidad no es consistente. Hay productores o ingenieros que hacen obras maestras y otros que entregan proyectos desastrosos.
  • Para poder aparecer en las recomendaciones editoriales, Apple exige que la música ya venga en Audio Espacial. Lo que deja fuera a cientos de miles de producciones independientes que no pueden por ahora entregar música en este formato.
  • Al ser una tecnología nueva, cada uno está haciendo lo que quiere. Hay ingenieros que usan la voz en modo phantom (fantasma), sin una ubicación central y jugando con instrumentos en posiciones sonoras poco convencionales. Rarezas y torpezas

Dolby Atmos (o Audio Espacial) no va a sustituir el sonido estéreo. Van a convivir por muchos años. Pues para que Dolby Atmos sea realmente un asunto masivo se requiere que las producciones independientes (que son la gran mayoría en las plataformas) ya estén grabando, mezclado y masterizando en Dolby Atmos y eso cuesta tiempo de aprendizaje y dinero, así que la cosa irá lenta.

Se requiere que la gente escuche música en audio espacial, que note la diferencia y para ello se necesitan audífonos y bocinas que le faciliten esta experiencia. Es allí donde productos como la Era 300 de Sonos brillan.

También se necesita que Dolby Atmos llegue masivamente a los autos, a YouTube y que en términos de contenido haya podcasts y producciones radiofónicas que vengan con el formato de audio inmersivo.

Falta mucho, pero a diferencia de otros intentos de formatos de surround del pasado, hoy la industria se ha puesto de acuerdo (con Apple liderando el asunto), por lo que será un hecho que Dolby Atmos llegó para quedarse.