El estudio de diseño de fragancias, Joya y Taylor & Miller Architecture / Light unieron sus fuerzas para crear una experiencia entre el contexto del consumo y la producción. Estos dos ambientes en la sociedad de hoy se han rasgado con demasiada frecuencia por el bien de la protección de la santidad de la tienda antiséptica y de marca posicionada.
Ubicado en Brooklyn, Nueva York, Joya Studio ofrece perfumes innovadores, cuidado personal y ambiente hogareño bajo su propia marca, además de involucrar a artistas y marcas emergentes y establecidos para proyectos únicos y colaborativos. Además de crear una tienda de concepto para mostrar esta colección, también hubo un deseo de crear un espacio para talleres, clases con perfumistas visitantes e instalaciones de arte.
Los diseñadores principales de Taylor & Miller, B. Alex Miller y Jeff Taylor, junto con Aoife O’Leary, buscaron crear un ambiente de venta al por menor para Joya que está literal y figurativamente suspendido entre la formalidad, la limpieza y la elegancia de un espacio de venta y la informalidad de una empresa altamente activa. El espacio está compuesto por una serie de grandes superficies de chapa de acero y madera suspendidas por barras de acero desde el techo de la fábrica. Ninguna de las superficies de acero se tocan.
Mientras que las superficies de acero definen el espacio de venta, el espacio de la fábrica en el cual están suspendidas permite la experiencia de venta. Los lados de las superficies de acero flotantes y sus nichos asociados en el espacio comercial de la exhibición se envuelven en una chapa de madera del roble. Mientras tanto, el lado de la fábrica de las superficies se deja enteramente desnudo; Al igual que todos los ángulos estructurales, soldaduras de unión asociadas y conducto eléctrico. La experiencia de los visitantes de los espacios de consumo y producción está separada intencionalmente por los elementos arquitectónicos más delgados; Una sola hoja de chapa y una sola hoja de acero.